
Hay muchas personas, que dicen, yo creo en Dios, yo le pido mucho a mi Diosito, yo hablo con Dios, pero con sus hechos, con sus palabras, con sus obras dicen mucho de ellos, y a la vez nada.
Se quieren enaltecer hablando que son espirituales, y no lo son, porque con su testimonio lo arruinan todo, si es espiritual, está bien Gloria a Dios, pero sealo en todo tiempo, no solo para decirlo a los demás, hágalo con su corazón, no con su boca.
Isaías 29:13 Dice, pues el Señor: porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mi, y su temor no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado.
Lo dice la Bendita Palabra de Dios.
Muchos se jactan diciendo, así dijo mi gran amigo, que debemos hacer así o así.
Otros, así dijo el cura en la misa, y la pura verdad.
Le voy ha ser claros, hablando espiritualmente, hay que recibir consejo que venga de la palabra de Dios, porque esta palabra es la que además de dar consejo, llega al corazón y hace que uno cambie la manera de ver las cosas.
Si digo q mi amigo me dió consejo, si no está fundamentada en la palabra, es consejo carnal y hasta mundano. (Hablo de aquellas personas que por su testimonio, van en otro camino que no es la palabra de Dios). Seamos sabios.
Si digo, el cura dijo en la misa, algo sobre lo que está aconteciendo, y hay que hacerlo, y lo repito como loro, que edificación hay? Miremos si lo que dice esta persona está en la biblia, si lo que está hablando me edifica.
Recalco lo siguiente, escudriñar la palabra, no porque otro me diga, así es, pero si, si lo dice la palabra así es.
Tomemos consejo directo, exclusivo, inequívoco, de la palabra, ella nos llena, nos habla lo que debemos de hacer, si estamos en mal camino ella nos dice que hacer, no nos alcahuetea, no nos dice lo que queremos oír, sino lo que debemos hacer.
No recibamos consejo del impio, sino de aquel que trae palabra de Dios.
Leamos Isaías 30:1 ¡Ay de los hijos que se apartan, dice Jehová, para tomar consejo y no de mi; para cobijarse con cubierta,y no de mi espíritu, añadiendo pecado a pecado!
Dirán, o sea que no debo de escuchar a un cura? Pues se lo digo, no, lo digo con propiedad; la palabra de Dios nos dice muchas cosas que ellos hacen y dicen al revés.
Entonces a los pastores tampoco debemos de creerles. Vean sus frutos, vean su testimonio. A lo que voy es, y sin irme tan lejos, si alguien nos quiere dar consejo, ok, está bien, pero nosotros mismos vamos a la biblia a ver si ese consejo que nos dieron es lo que Dios quiere que nosotros tomemos.
En este momento de dificultad, no hay dinero, alguien me dice, póngale velas a tal santo que el le hace el milagro, y yo leo la palabra que dice, No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que este arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinadas a ellas, ni las honraras, porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visitó la maldad de los padres sobre los hijos, hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrece. Donde dice esto? En Éxodo 20:4-5.
Para aquella persona que no Lee la palabra, dirá, PS es un santo al que le voy a pedir, el me ayudara. Pero si Lee la Biblia notará que es pecado. Cómo leiamos en Isaías 30:1 añadiendo pecado a pecado, colocarle más pecado y alejándonos más de Dios, por seguir un consejo errado? No le añadamos más pecado a nuestras vidas.
Fíjense algo, la religión no salva a nadie.
Miren Hechos 8:1:3, Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles. Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él. Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel.
Fíjense en este hombre, era cruel, era despiadado, mataba y enviaba a la cárcel a todo aquel que seguía a Cristo.
Este Saulo, era malo? Si, pero para el mismo, no lo era, porque tenía en su conocimiento la ley, lo que le enseñaron desde pequeño, para él, hacia lo que era debido.
Era su parecer, su propia opinión, y no veía lo que había que ver, al Señor, el único salvador. Él tal vez veia lo que le aconsejaban otros, los sacerdotes que no concentian lo que Jesús decía, y llenaban de consejos malos a Saulo, y el con el conocimiento que tenía de la ley, les creía.
Pero en Hechos 22:2-3 Nos habla lo siguiente, el mismo Saulo ya convertido, ahora Pablo.
Yo de cierto soy judío, nacido en Tarso de Cilicia, pero criado en esta ciudad, instruido a los pies de Gamaliel, estrictamente conforme a la ley de nuestros padres, celoso de Dios, como hoy lo sois todos vosotros. Perseguía yo este Camino hasta la muerte, prendiendo y entregando en cárceles a hombres y mujeres; como el sumo sacerdote también me es testigo, y todos los ancianos, de quienes también recibí cartas para los hermanos, y fui a Damasco para traer presos a Jerusalén también a los que estuviesen allí, para que fuesen castigados.
El era celoso de Dios, el tenía la ley, muy estricto, y que le pasó? El mismo Señor Jesucristo, se le presento en el camino, e hizo un trato con el, eso lo leemos en Hechos 22:6-16.
Amigo, solo Dios hace al hombre feliz, solo el Señor Jesús tiene salvación, solo la palabra de Dios cambia a la persona.
Saulo, convertido en Pablo, por la gracia de Dios, llevo la palabra de Dios a mucha gente, pero siguió el consejo de Dios directamente, ya lo que creía desde pequeño, y lo que los sacerdotes le decían, quedó atrás, lo que cuenta, y tiene gran peso, es seguir a Cristo y leer la verdadera palabra y verdadero consejo.
Para culminar leamos
Santiago 3:11-12, ¿Acaso alguna fuente echa por una misma abertura agua dulce y amarga? Hermanos míos, ¿puede acaso la higuera producir aceitunas, o la vid higos? Así también ninguna fuente puede dar agua salada y dulce.
Fuente? Cómo así? Una persona que habla de Dios, debe comportarse como Dios manda, debe de hablar como Dios manda, debe de haber un cambio en la vida del que habla de Dios.
Si habla de Dios y obra lo contrario, este es una fuente con agua dulce y salada.
Insisto en lo siguiente porque lo presencié.
Una persona coloco a todo volumen su equipo de sonido, a escuchar la misa, ok, hasta aquí nada anormal, lo que vi anormal, es que después de escuchar la misa, cambio de emisora y a escuchar rancheras a todo volumen, y música mundana y música que no edifica para nada, lo poco que pudo haberse edificado, lo opaco con esto.
Igual puede ser en un culto, si alguien lo escucha, ok, pero si hace lo contrario a la palabra, que edificación tiene?
Concluyo con esto.
El consejo y la verdad siempre la dará el Señor por medio de su palabra, no porque aquella persona sepa de biblia, sea la indicada en aconsejar, hay que ver su testimonio, no porque mi mamá y mi papá me enseñaron algo de la palabra, con eso me voy a quedar, debo de seguir buscando su palabra para edificación de mi alma, tengamos cuidado de lo que en nuestra sabiduría tenemos, porque no es de nosotros, si no de Dios.
Dios les bendiga.
Marcos Guardia.
No hay comentarios